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A un lado Singer, Lanzante e incluso RUF, hay un nuevo nombre de peso en la comunidad Porsche. Ya conocíamos su demencial 911 que podía exceder las 11.000 RPM y ahora es turno de algo más fabuloso. En 1998 Porsche ganó las 24 horas de Le Mans con el 911 GT1 y casi tres décadas después Tuthill rinde homenaje a ese flamante nine eleven con esto, el GT One. No, no es el rival hecho por Toyota para esa edición de Le Mans, es un restomod como ningún otro.

Bueno, más que un restomod per se, Tuthill lo que hizo fue recrear a su manera al Porsche 911 GT1 para dar forma al GT One. Partiendo de la versión de calle o Straßenversion original, basado en el 993, Tuthill realmente la sacó del estadio con esta creación que no tiene nada que envidiar al 911 GT1 y al RUF CTR3. Qué mejor que revelar semejante tributo a Porsche en el automovilismo que los escenarios de Pebble Beach.

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Versión personal y sentida de una leyenda

Recuerda ese Porsche 911 GT1 que causó ruido por estos días en redes sociales, pues aquí lo tiene, Tuthill era el responsable. Bajo todo esto posiblemente se encuentre el chasis de un Porsche 993 o 996, al menos eso creemos dado que Tuthill no quiso revelar el secreto.

Lo que sí sabemos es que el auto se hizo de forma artesanal y más que un restomod, es una recreación moderna del 911 GT1. En concreto, de la versión 1996 y 1997, con sus formas más curvilíneas, faros redondeados y un aspecto más ancho, puro e imponente. El 911 GT1 que ganó Le Mans ya se basaba en el 996 y era mucho más alargado y una aerodinámica más radical.

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Realmente parece un auto de carreras, calzado en Michelin Pilot Sport y con su poderoso motor allí expuesto. Note la suspensión pushrod encima del motor.

Perfección hecha Porsche

El responsable por el diseño del Tuthill GT One es Florian Flatau, el mismo responsable del Singer ACS y el E-Legend tributo al Audi Quattro. El hombre sabe de tributos a clásicos alemanes.

Admire la estampa alargada y la cabina en forma de lágrima, con un techo que se alarga hasta un alerón cola de pato que recorre toda la parte trasera. Mire esos pasos de rueda ensanchados de forma correcta, ni un milímetro más para rozar la exageración. La nariz alargada y faros redondos con tomas de aire, todo fiel al 911 GT1 en el que se basa, pero con su propio estilo, con su aura bien definida.

Los dos extremos del GT One abren como el auto de carreras, revelando el chasis tubular, motor y suspensión pushrod expuesta de este proyecto. Realmente es un auto inspirado en el automovilismo, hasta la toma de aire en el techo conduce al motor. Todos los trazos son limpios, encajan en su sitio de forma apropiada. Hasta los rines en forma de turbina típicos de un prototipo de Le Mans son más que apropiados, junto a las luces traseras que viven entre los escapes y ese alerón.

Una fiera con pedigrí del automovilismo

Hablando de motores, Tuthill emplea un motor bóxer de 6 cilindros, que puede ser aspirado o con turbo. La potencia será de 500 o más de 600 caballos y estará acoplado a las ruedas traseras vía una transmisión manual de siete marchas o la opción incorrecta de una automática doble embrague. Todo envuelto en fibra de carbono y aluminio con tanta nostalgia de los noventa, que volvió a reunir a los Backstreet Boys.

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A esa exquisitez de cabina sólo le hace falta un tercer pedal. Por fortuna, es una opción que se puede solicitar.

Y luego está la cabina, una completa maravilla minimalista que nos recuerda al Porsche Carrera GT. Un color crema y una consola central elevada, con la palanca de cambios expuesta y muchos interruptores estilo jet de combate. El tablero posee el diseño plano y básico de un 993, pero con un clúster digital para no desentona. Las butacas tipo cubo lucen fabulosas igualmente.

Este modelo es una belleza, un tributo hecho con amor y mucho gusto. Pero, como se podrá imaginar, tanto derroche de piezas hechas a la medida y cariño cuestan. No sabemos cuánto, pero Tuthill hará sólo 22 copias y eso debe decirle todo lo que necesita.

En materia de restomods de Porsche y proyectos de esta índole, el GT One de Porsche está en el podio de los mejores, si no es que es el mejor en definitiva.

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Mire el modelo original, salvo por el alerón es una recreación preciosa, un homenaje casi perfecto.
Andrés Suárez
Cine🎬/Fotografía📸/Autos🚗. A veces hablo locuras sobre carros en Fuel Car Magazine.

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