La Fórmula 1 entró en su recta final y aunque ya tenga rey, el show no puede detenerse. Ahora es el turno de ver el Gran Premio de Estados Unidos y Carlos Sainz coronó la clasificación. Aunque Charles Leclerc tuvo el segundo mejor tiempo, Max Verstappen saldrá en la segunda casilla por una penalización del monegasco. Que el campeón ya no pueda ser el más rápido es algo normal, ya que la corona le suma algo de peso en el monoplaza. En tercer puesto saldrá Lewis Hamilton, que a pesar de no tener un buen tiempo oficialmente, las penalizaciones le ayudan en este caso.
Una triste primera sesión
La clasificación del Gran Premio de Estados Unidos empezó de luto. La razón fue la muerte de Dietrich Mateschitz, el cofundador del equipo Red Bull. Fue una partida repentina y triste, pero al menos vio a su equipo y a su piloto estrella como campeones por segundo año consecutivo; paz en su tumba. Sin tiempo para llorar, la Q1 dio arranque con una temprana partida de Magnussen, Schumacher, Latifi, Albon y Zhou. Ellos querían establecer tiempos rápidos antes de que los gigantes se despertaran. Un par de minutos después, los Red Bull salieron, con ganas de honrar la partida de su fundador como se debe: con tiempos imbatibles en la pista.
A media sesión, todo parecía marchar sobre rieles, con los Red Bull muy arriba en los tiempos seguidos de cerca por los Ferrari. De repente, Hamilton se despertó y entró entre los autos del Toro Rojo, ubicándose delante de Pérez. Teníamos la esperanza de que el mexicano hiciera uno de sus milagrosos tiempos, pero por su penalización, tendrá que hacer una de sus milagrosas trepadas desde la mitad de la grilla. Muy para el pesar de los Red Bull, el mejor tiempo lo hizo Carlos Sainz, mientras que los eliminados fueron Magnussen, Ricciardo, Ocon, Schumacher y Latifi. Por cierto, a último momento, Schumacher hizo un mazespin que le arruinó la vuelta rápida.
Una Q2 movida
La segunda sesión de la clasificación en el Gran Premio de Estados Unidos se pareció a la primera, como si fuera el juego del lobo en el bosque. Los niños salieron primero, buscando adaptarse a un circuito tan técnico como es el de Austin. Con niños nos referimos a Gasly, Vettel, Stroll, Tsunoda y Bottas, los moradores de la media tabla. Entre ellos estaban haciendo buenos tiempos hasta que llegaron los lobos.
Aquí los lobos son Verstappen y Pérez, quienes salieron para reclamar sus puestos en la parte superior. Los lobos de las otras manadas (Mercedes-AMG y Ferrari) también salieron para hacer valer su territorio, todos a los 11 minutos de acabar la sesión. Mientras ellos tenían un día movido, Gasly no lo pasaba bien, ya que no se hallaba en el auto y parecía tener problemas con los frenos y la curva uno. De manera predecible fue uno de los eliminados al acabar la sesión, al igual que Albon, Vettel, Zhou y Tsunoda. El mejor tiempo lo hizo Charles Leclerc, certificando que Ferrari estaba en su mejor forma.
Una Q3 a la española
En este caso, fueron los punteros quienes madrugaron a hacer buenas vueltas. Norris empezó con fuerza, pero Bottas hizo el primer tiempo rápido. Luego, Verstappen sorprendió haciendo un buen tiempo y ubicándose primero. A partir de ahí, los pilotos principales se batieron a duelo de tiempos. Primero fue Verstappen, quien no lo necesita por ser el campeón. Luego lo hizo Leclerc, a quien no le sirve de nada por una penalización de 10 puestos. Finalmente lo intentó Hamilton, quien lo necesita para el segundo lugar del campeonato, pero no lo pudo lograr.
Restando 25 segundos en el reloj, Charles inició su vuelta rápida, mientras que Verstappen, Sainz y Hamilton lo iniciaron faltando solo milésimas para acabar la jornada. El resultado de todo este frenesí de última hora es que Carlos Sainz Jr. se robó la mirada de todos al parar el cronómetro en 1:35.356, quedándose con la pole del Gran Premio de Estados Unidos. Con las penalizaciones aplicadas los puestos oficiales son Carlos Sainz Jr. de primero, seguido por Max Verstappen y Lewis Hamilton.
