A estas alturas Subaru está jugando con todos nosotros. Tantos años sugiriendo que van a revivir al Impreza (ahora WRX) STi, pero nada que lo hacen. Eso sí, ediciones especiales y más deportivas que podrían llevar esa sigla no han faltado. Y he aquí una más, que tiene el valor agregado de ser modificada por Subaru Tecnica International, pero no llevar su insignia; se llama tS y es un nuevo WRX más ágil y divertido.
No confundir con el WRX tS Sportwagon, modelo que Subaru llamó así desde el principio a pesar de ser una variante station wagon práctica del WRX. ¿Y por qué digo que Subaru juega con nosotros? Porque tS traduce a tuned by STi. A estas alturas sólo llámenlo WRX STI, instalen un enorme alerón y vean como todos los fanáticos llegan en masa.
Mejorando cada vez más, pero sin poder extra
Gracias a la existencia del Subaru WRX tS es que creemos que un STi ocurrirá, pero tampoco ocurrirá. Algo así como el sedán japonés de Schrödinger, si lo prefiere.
Lo que hizo STI con este WRX fue añadir varias mejoras a la mecánica, pero sin elevar la potencia del motor bóxer turbo, que se mantiene en 271 caballos. Primero están los amortiguadores adaptativos con ajuste electrónico, con tres modos de firmeza: confort, normal y sport.
Acto seguido están los frenos, firmados por Brembo y con seis pistones adelante y dos atrás. No sólo son más grandes, también reducen el desgaste en condiciones más extremas disipando mejor el calor, como en una pista de carreras por ejemplo.
El STI que casi fue
¿Lo mejor? Todas estas mejoras son para el WRX manual, nada de automáticos aquí. Todo esto suena fantástico, pero está a nada de ser un WRX STI y Subaru lo sabe. No sería difícil añadir más poder al motor bóxer y por fin traer la denominación STI, unos 300 a 330 hp estarían perfectos si me lo pregunta.
Pero por alguna razón Subaru se toma el tiempo para crear más ediciones especiales del WRX que podrían ser un STI y no lo son. Por eso es que creemos que Subaru quiere cumplir y regresar la insignia, a la vez que prefieren no hacerlo y que el WRX siga los pasos del BRZ: muchas ediciones especiales, pero nada de potencia extra.
Casi lo olvido, hay varias mejoras visuales. Como rines de 19” y calzado Bridgestone Potenza, calipers pintados de dorado, logos tS y acentos negros para el spoiler trasero. En la cabina debuta un clúster digital de 12,3” que puede proyectar la navegación; además de unas sillas tipo cubo Recaro. El toque final son los logos STI en el botón de arranque, por si quedaba duda que Subaru juega con nuestras emociones al no darnos el verdadero Impreza WRX STI.
Como mínimo, un WRX Wilderness más aventurero no sería una mala idea, así sea sólo para EE.UU.