Rolls-Royce Boat Tail
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Rolls-Royce anunció el regreso de su división Coachbuild, con la intención de construir el auto de lujo de sus sueños. No importa qué tan loco sea, siempre y cuando tenga como justificar un capricho de millones de dólares. El primero en nacer gracias a esta iniciativa es el Rolls Royce Boat Tail, un proyecto que tomó 9 meses y que parece más un yate de lujo que un automóvil.

El Boat Tail fue encargado por uno de los exclusivos clientes de Rolls-Royce, y sólo tres unidades serán fabricadas; las dos restantes reservadas para dos selectos dueños de Rolls-Royce, y cada uno tendrá sus toques personales para diferenciarlo uno del otro. Posiblemente, quien encargó este bote sobre ruedas un día, aburrido por la situación global, pensó “¿Qué pasaría si combino una lancha, un convertible de lujo y una mesa de picnic? y luego de revisar su cuenta bancaria, llamó a Rolls-Royce a preguntar si podían fabricar lo que acababa de soñar.

Rolls-Royce Boat Tail 1
Un auto que sólo puede describirse como «un yate o bote de lujo sobre ruedas», el Rolls-Royce Boat Tail es el perfecto ejemplo de qué hacer cuando se tiene demasiado dinero.

Atrás es donde está la fiesta

La división artesanal Coachbuild comenzó con un Rolls-Royce Dawn para darle forma al pedido de este exclusivo cliente. Lo primero que puede notar es la parte trasera del Boat Tail, que fiel a su nombre tiene una línea inspirada en un bote de lujo o un yate. El baúl incorpora un diseño de madera náutica, con dos compuertas estilo mariposa que abren ante el clic de un botón. Bajo ellas es donde el Boat Tail esconde la mayoría de sus excesos.

Esta área se conoce como “hosting suite” (porque baúl suena demasiado plebeyo), y contiene una parafernalia de elementos dignos de alguien que gasta no menos de 7 figuras por noche. Una nevera, digo, cool box, mantiene fría la champaña (o vino) que obviamente todos cargamos en el baúl de nuestro carro. Junto a ella, Rolls-Royce incluye un set de mesas de coctel, sillas plegables italianas, cristalería y utensilios fabricados en París. La cereza del pastel es la sombrilla, o “parasol telescópico” como lo nombra la marca inglesa, que se despliega desde el baúl del Boat Tail.

Todo este intrincado equipamiento en el baúl requiere de una considerable cantidad de energía, por lo cual Rolls-Royce rediseñó todo el cableado del Boat Tail e incluyó cinco unidades ECU para controlar la energía sólo de la parte trasera. Todo sea para que la nevera funcione entre los 80°C y -20°C, y mantenga las “bebidas refrescantes” a la temperatura ideal.

El sueño de un coleccionista

El frente es totalmente único para el Boat Tail, con una pintura ecléctica con dos tonalidades de azul. En el caso de este Boat Tail en particular, destinado para el cliente que tuvo la loca idea de ordenarlo, Rolls-Royce incluirá dos relojes custom made de la casa suiza Bovet 1822, uno para el dueño y el otro para su pareja. Estos se encuentran anclados al tablero del auto, y pueden ser removidos y usados normalmente cuando deseen sus dueños.

Hablando de elementos coleccionables, Rolls-Royce incluye un bolígrafo Montblanc en su propio estuche en aluminio hecho a mano, que podrá encontrar en la guantera del Boat Tail. Lo único que hay en mi guantera es el control para el radio del carro. Ya que toco el tema del sistema de sonido, el Boat Tail posee un equipo hecho a la medida por Rolls-Royce, con 15 salidas de audio. Solo este modelo posee 1813 partes exclusivas, y buena suerte encontrándolas en su mecánico de confianza.

Con todo este exceso, en especial en el baúl, ¿Dónde está el techo del Boat Tail? Verá, techo convertible como tal no tiene. En su lugar, Rolls-Royce incluye una especie de carpa que puede ser colocada donde iría el techo suave del Boat Tail. Eso sí, la marca inglesa solicita cortésmente a su dueño que no conduzca con esta puesta, porque es más una medida temporal para escampar. Pero hey, por lo menos tiene dos relojes hechos a mano y un bolígrafo para coleccionar.

Si se llega a ganar la lotería o a hacer millones con BitCoin, haga una llamadita a Rolls-Royce y encárgueles el auto más absurdo y excesivo que pueda imaginar. Después de todo, no le pueden decir que no si el cheque es lo suficientemente grande. Pero por favor, que le instalen un techo funcional.

Andrés Suárez
Cine🎬/Fotografía📸/Autos🚗. A veces hablo locuras sobre carros en Fuel Car Magazine.

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