La marca de bebidas energéticas Red Bull está en problemas por hacer un video promocional con autos de drift (o derrape) en la Plaza Sofiiska en Ucrania, declarado Patrimonio Histórico de la Humanidad por la UNESCO. El problema es que, aunque Red Bull pidió el permiso, la alcaldía no autorizó el préstamo del espacio para la grabación. Aun así, el equipo siguió adelante con el video sin ninguna medida de seguridad. Llevaron 2 autos de drift y con la plaza totalmente abierta se pusieron a hacer derrapes, dejando huellas en al menos 2.000 metros cuadrados de ladrillo. Para empeorar la cosa, la plaza y todo lo que contiene es considerado patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Creo que se les fue hondo.
Indignación nacional con olor a caucho quemado
Todo empezó el 5 de agosto, cuando Red Bull quería hacer un video promocional para ellos y para celebrar el día de la independencia de Ucrania con 2 pilotos de drift. El plan era traer a los pilotos profesionales Oleksandr Grynchuk y Conor Shanahan para hacer maniobras cinematográficas. Iban a grabar las maniobras y reacciones en la plaza cercana a la catedral de Santa Sofía de Kiev, que data del siglo XI. En principio parecía un plan simple con una receta conocida, autos rápidos haciendo drifting en un lugar hermoso ¿Qué podía salir mal?
Pues lo que salió mal es que el ayuntamiento les negó el permiso. El consejo de la ciudad de Kiev no autorizó el evento, en parte por su importancia histórica y además, porque no es la única autoridad que podía decidir sobre el monumento. Al ser patrimonio de la humanidad, la UNESCO, el Ministerio de Cultura, la Administración de la Plaza Sofiiska y hasta la Policía debían tomar cartas en el asunto. Al parecer, los organizadores de Red Bull Ucrania no se contactaron con estas entidades y por eso no les dieron el permiso.
Haremos drift, quieras o no
Tal parece que al equipo de Red Bull no le importó eso y aun así se presentaron en la plaza el 10 de agosto a las 6 de la mañana. Llegaron con 2 Nissan modificados, un 350Z y un Silvia S15 con sus respectivos pilotos y con la cantante Alyona Alyona en uno de los autos como pasajera. Sin cerrar la plaza ni poner medidas de seguridad, empezaron a hacer drift alrededor del monumento a Hetman Bohdan Khmelnytsky de 133 años de antigüedad.
El hecho de que pusieran a los transeúntes en riesgo fue lo que más ofendió a Konstiantyn Usov, vicealcalde de Kiev. Osov denunció el caso en redes sociales y en una larga misiva rechazó, además del peligro, que dañaran el histórico ladrillo amarillo de Clinker con marcas de neumáticos. Lo curioso del caso es que junto a la plaza está la central de Policía de Kiev y estos se demoraron en tomar cartas en el asunto, a pesar del humo y del ruido. Finalmente se presentaron y se llevaron los autos en grúas. El organizador de evento podría enfrentar una pena de hasta 4 años de prisión y aún están calculando la magnitud de los daños. Unos empleados de Red Bull intentaron limpiar el desastre, pero sin mucho éxito. La indignación causó que borraran todo el material del espectáculo, emitieron una disculpa y ahora todos los integrantes se están repartiendo culpas.
