Cuando creímos que era el final, viene toda la furia de Baviera y nos golpea en la cara. “Al que no le gusta se le dan dos tazas”, dice un refrán por ahí. Como opuesto al Label Red, BMW anunció al XM 50e híbrido, una variante “de entrada” del controvertido y enorme modelo que se atreve a seguir el impecable legado del BMW M1 original.
Creemos que BMW lo hace de adrede, porque el XM 50e híbrido en el video de presentación es verde. ¿Sabe qué más es de ese color? Los cerdos villanos del juego Angry Birds, los cuales sirven de inspiración para el XM. Si no nos cree mírelo detenidamente por unos segundos y lo notará. Suficiente sobre su diseño, vamos a la intención de BMW con todo esto.
Mastodonte “de entrada”
La idea tras el XM 50e híbrido es ofrecer ese buque de BMW a más público. No todos querrán un enorme SUV con un V8 que supera los 100.000 dólares, ni tampoco una bestia de 738 hp. La idea entonces, como si se tratase de un 735i o 740i, es brindar una alternativa con un motor y precio más sensato. Es extender el alcance del XM para quien se arriesgue a decir que le gusta, pueda siquiera rozarlo. No queremos sugerir que un BMW es asequible, pero en comparación al XM normal o Label Red, el 50e será “una ganga”.
Para mover al XM 50e híbrido BMW recurrirá a su clásico motor seis en línea twin turbo, con asistencia eléctrica. Aún no sabemos si será enchufable o no, pero muy seguramente será equivalente a un X5 de media gama, sea con hibridación ligera o completa. Así que imaginamos que tendrá entre 400 y 500 hp a su disposición. También podría pedir prestado el motor del Serie 7 tope de gama (M760e) que asciende a 563 equinos. Todo por el momento es especulación.
El XM en cuestión podría desfilar junto al Label Red en el Salón de Shanghái que se celebrará la próxima semana. Quizá esa es una pista del mercado al que va enfocado, ya que el XM 50e podría ser solo para Asia y Europa. En EE.UU. prefieren los V8 así que no se pierden de mucho, y al final del día este es un auto exclusivo que venderá en un volumen más bajo que cualquier otro BMW M. Francamente nos parece mejor un X7 si de lujo extremo se trata, o un X5 cuyas prestaciones son sorpresivamente similares.