Es inevitable, el 17 y 18 de abril son los días oficiales del Ford Mustang. Luego de un tiempo de silencio para concentrarse en el desarrollo, Shelby emergió de sus cuarteles con la versión “envenenada” del Mustang S650. Damas y caballeros, he aquí al diabólico Shelby Super Snake, una verdadera víbora que casi duplica la potencia original del Mustang V8 “estándar”.
Lo que aquí ve es el heredero del Shelby GT500 de generación anterior, sólo que más rápido, agresivo y extremo. Es una oda al motor V8, declarando que el propulsor americano por excelencia no morirá en un buen tiempo. Y, como es costumbre, Shelby responde el llamado para aquellos que un Mustang GT o Dark Horse “normal” no es suficiente.
Cobra venenosa con más de 800 hp
Así como el Mustang original, el centro de las modificaciones del Shelby Super Snake aparecen en su motor. Sólo que, en vez de cambios sutiles, la modernidad clama por un enorme sobrealimentador Whipple. Junto a un escape Borla, nuevo radiador y refrigeración optimizada para el V8 y ejes de transmisión reforzados, el Super Snake envía más de 830 caballos de potencia a las ruedas traseras, casi el doble de un Mustang GT común y silvestre.
La dosis de alto desempeño no se enfoca en la aceleración; Shelby añade frenos con mayor poder, rines ligeros en magnesio de 20” con llantas de mayor perfil y, exclusivo del Super Snake manual, un selector de marcha más corto y eje cardán de alto desempeño. En ese sentido, usted puede ser aburrido y elegir un Super Snake automático o elegir la opción correcta y tener 830 equinos a su completa disposición.
Muscle car de colección
Si todo esto es demasiado, Shelby le ofrece un Mustang Super Snake con un tratamiento puramente cosmético. Este incluye un capó con nuevas tomas de aire, pasos de rueda ensanchados en fibra de carbono, splitter y alerón, difusor trasero y las calcomanías Shelby para diferenciarse de una imitación cualquiera.
En la cabina los cambios son más mínimos, como una placa numerada, acabados en cuero con logos de Shelby, una palanca de cambios especial (si es manual) y el toque final son proyectores en las puertas. Estos muestran la silueta de la cobra clásica de Shelby, proyectados al suelo en ambientes oscuros.
Sin duda, Shelby “la sacó del estadio” con su tratamiento venenoso para el Mustang. Este es sólo el inicio, porque el futuro depara más versiones poderosas del Mustang S650 con el sello Shelby.
