Valió la pena trasnochar para ver el GP de Australia pues por fin la F1 tuvo una carrera totalmente impredecible este 2024, con todo y victoria de Carlos Sainz Jr. Desde las prácticas libres parecía que este fin de semana sería diferente pues Ferrari dominó en FP2 y FP3. La fortuna, en cambio, no le sonrió a Alexander Albon. El tailandés destrozó su Williams durante la primera práctica y el equipo decidió cederle el monoplaza de Logan Sargeant. Nada personal, así es la F1.
Las esperanzas de un gran premio diferente duraron poco pues Max Verstappen arrasó en la clasificación, siendo el único en girar por debajo de 1:16. Sainz y Sergio Pérez completaron los tres primeros lugares en la Q3, sin embargo el mexicano recibió una penalización y arrancó sexto. Charles Leclerc quedó en la tercera casilla, seguido por los dos McLaren. Hasta aquí nada extraordinario, pero Albert Park nos tenía guardadas sorpresas que nadie vio venir.
VER & HAM = OUT
La carrera tuvo emoción desde la largada pues Lando Norris adelantó a Leclerc antes de la primera curva. George Russell hizo lo propio con Pérez y el orden empezó a moverse en la mitad de la parrilla. En la segunda vuelta Carlos Sainz adelantó a Verstappen con relativa facilidad, ganándose el aplauso de las graderías. Sainz empezó gradualmente a tomar distancia mientras el Red Bull de Verstappen empezaba a sobrevirar y, peor aún, a humear. Dos vueltas después el RB20 del campeón quedó fuera de competencia por un incendio en su rueda trasera derecha.
Leclerc y Oscar Piastri entraron a pits en la décima vuelta para montar neumáticos duros; Sainz, Norris y Pérez en la punta estirando al máximo sus gomas medias. Pronto el mexicano empezó a reportar desgaste excesivo, pero eso no parecía afectar a un Sainz que ya estaba 7 segundos delante de Norris. El turno de Pérez y Norris llegó hasta la vuelta quince y el de Sainz una vuelta después, dejando momentáneamente a Fernando Alonso en punta. En ese momento el motor de Lewis Hamilton dijo basta, provocando un auto de seguridad virtual que permitió a Sainz recuperar el liderato mientras su compatriota aprovechaba para entrar a pits.
La carrera empezó a enfriarse finalizando la primera mitad; Sainz cinco segundos delante de Leclerc y Pérez adelantando a Alonso para acercarse a los punteros. En este punto Zak Brown ordenó a sus pilotos cambiar de lugar y Piastri cedió la tercer posición a un Norris con llantas más frescas. Esta estrategia no le gustó para nada al público, pero pronto dio resultado. Norris pudo presionar tanto a Leclerc que el monegasco tuvo que parar a cambiar de neumáticos.
Sorpresas hasta el final
Leclerc salió a pista cuarto, apenas delante de Pérez quien entró también la próxima vuelta y salió noveno. Para la vuelta cuarenta Sainz ya estaba lejos —dominando la carrera como lo haría el mismísimo Verstappen— seguido por Leclerc, Norris y Piastri. En esa misma vuelta el australiano bloqueó sus llantas en una frenada y salió de pista, perdiendo cuatro segundos antes de parar en pits. Norris y Sainz entraron también la vuelta siguiente, regresando a pista tercero y primeros respectivamente. Las vueltas siguientes transcurrieron sin mayor novedad, pero Albert Park todavía tenía una sorpresa más bajo la manga.
Faltando apenas dos vueltas para terminar, Sainz empezó a manifestar que sus neumáticos estaban en las últimas. Muchos contuvimos la respiración y justo en la última vuelta George Russell tuvo un aparatoso accidente que selló la victoria del español. El Mercedes del británico quedó volcado en la mitad de la pista, causando un safety car virtual y permitiendo a Sainz cruzar la meta tranquilo, seguido por Leclerc y Norris. Y como si faltaran sorpresas, nadie menos que Günther Steiner entrevistó a los ganadores.
Conclusiones después de Australia: Red Bull no puede confiarse porque Ferrari está al acecho, a Sainz le lloverán ofertas este 2024 y el apéndice sobra para un piloto de F1. Solo 4 puntos separan en estos momentos a Verstappen de Leclerc y a Red Bull de Ferrari en sus respectivas tablas. ¿Tendremos más sorpresas dentro de quince días en el legendario circuito de Suzuka o nos seguiremos memorizando el himno holandés?
