¡Qué carrera! Puede que Max Verstappen, como siempre, haya resultado victorioso en el GP de Países Bajos, pero fue una carrera emocionante de inicio a fin. La Fórmula 1 regresó de sus vacaciones con mucha fuerza y no nos decepcionó. Esas primeras 20 vueltas fueron mágicas pero no deje que nos adelantemos.
Si quiere una carrera emocionante agregue algo de lluvia inesperada y tiene una receta ganadora. Con toda la locura, caos y mil estrategias diferentes del inicio, Max Verstappen logró hacerse con la victoria en el GP de Países Bajos. Son tres victorias al hilo para el neerlandés en su casa, y el piloto ya piensa “¿en qué carrera conquistará el título de forma anticipada?” Si nos lo pregunta, parece que en Japón o Estados Unidos a este ritmo.
Un arranque de infarto
Lo que parecía una pista seca en un santiamén se transformó en un pequeño aguacero. No tuvimos mucho drama en la largada, más allá de Alex Albon desplomándose y Fernando Alonso escalando posiciones. Cuando la grilla llegó al tercer sector se encontró con una pista completamente húmeda que tomó a todos por sorpresa.
Muchos pilotos pararon de inmediato y fue la estrategia correcta. Checo Pérez que largó séptimo fue el primero en gomas intermedias y salió a pista con un ritmo brutal. Verstappen y Alonso que peleaban por la punta entraron una vuelta después y le regalaron un liderato enorme al mexicano, quien era escoltado por Guanyu Zhou y Pierre Gasly también en intermedias.
Algunos intentaron que las gomas lisas funcionaran pero fue inútil. La lluvia no duró mucho pero causó suficiente caos para revolver por completo el orden. Los Mercedes-AMG que arrancaron en el top-10 terminaron en el fondo de la tabla y tuvieron mucho terreno por remar para recuperarse y Ferrari, siendo Ferrari, tuvieron una parada para el olvido con Charles Leclerc, quien después dañó su alerón y terminó retirándose.
La «calma» antes de la tormenta
LAP 16/72
Sargeant into the barriers (he's okay) 💥
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— Formula 1 (@F1) August 27, 2023
Luego de esa danza inicial la pista se secó y esta vez fue Verstappen el que madrugó a la estrategia y puso gomas lisas primero, heredando el liderato de su compañero. Alonso revivió las esperanzas de Aston Martin y se colocó tercero con categoría, incluso con velocidad para luchar por más.
Logan Sargeant repitió su choque en la clasificación y trajo el primer auto de seguridad en el GP de Países Bajos, juntando a Verstappen con el resto de la grilla. Luego de limpiar el desastre, la realargada no trajo demasiadas sorpresas más allá de Albon recuperando terreno y Guanyu Zhou cayendo del segundo a décimo puesto. Curiosamente los Red Bull no se escaparon en la punta, y tuvimos una situación en la que casi toda la grilla estaba bastante junta.
Aguacero parte dos: llueve sobre mojado
Before the red flag, Zhou aquaplaned into the Turn 1 barriers
His car has damage, but the Chinese driver is out of the car and looks okay (if a little damp) 👍#DutchGP #F1 pic.twitter.com/1kZA7M5A0X
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Durante el resto de la carrera las amenazas de llovizna persistieron, y se hicieron realidad con once vueltas para el final. Por si el caos del inicio no bastó, el final del GP de Países Bajos tenía que ser una locura. Todos pararon por gomas intermedias a pesar del diluvio que golpeó el circuito de Zandvoort, y aun así Checo Pérez se pasó en la primera curva y cedió el segundo puesto a Alonso. Acto seguido Zhou chocó y ese era solo el inicio del drama.
La bandera roja emergió mientras Pérez estaba en los pits, acto que casi destruye su carrera pero la FIA decidió relanzar la carrera contando desde el último sector antes de la neutralización, ubicando al mexicano en tercero.
Ganó el de siempre, pero con mucha emoción
La carrera que no quería terminar finalmente reinició cuando la lluvia cedió un poco, dejando que las últimas 8 vueltas del GP de Países Bajos se corrieran bajo bandera verde. Nadie iba a parar a Verstappen, aunque Alonso lo intentó, y el actual campeón consiguió su novena victoria al hilo, igualando el récord de Sebastian Vettel diez años después.
Alonso regresó por fin al podio desde Canadá, un segundo puesto que debe saber a victoria para el asturiano. ¿Y el tercero? Fue Pierre Gasly, quien terminó cuarto pero aprovechó una penalización de 5 segundos a Checo Pérez, completando un podio tan colorido como el que tuvimos en Mónaco.
