Pensando en la gente que necesita más que una Toyota para moverse, el Range Rover acaba de llegar a Colombia. Sí, la misma familia de modelos que eran los favoritos de la Reina Isabel II ahora pueden ser suyos y sin hacer importaciones a terceros, sino con servicio postventa y representación nacional. Ajústese los lentes, prepárese un té y aliste su chequera, porque después de ver todo lo que trae esta camioneta al país, va quedar más que antojado.
¿Qué tan lujoso es?
Solo véalo, el Range Rover llega a Colombia con el lujo inglés que tanto caracteriza a la marca. Nada de excentricidades, sólo simplicidad. La carrocería tiene un aspecto suave, prístino y sin detalles exagerados. Mejor dicho, todo lo opuesto a algo como un Lamborghini Urus. Su estampa es tan limpia que logra un coeficiente de arrastre de solo 0.30 y las luces están perfectamente enrasadas con las superficies. Por dentro la temática es la misma, con pocos botones, pantallas enormes y grandes superficies suaves al tacto. El panel de instrumentos es de 13.7 pulgadas, con funciones en 3D, alta definición y se complementa con un head-up display que proyecta parte de la información en el vidrio panorámico.
Luego está la pantalla de info-entretenimiento, que es de 13.1 pulgadas y cuenta con Android Auto y Apple CarPlay. Ambas pantallas se gobiernan con el sistema operativo PIVI Pro, que tiene la distinción de tener una de las mejores interfaces gráficas de la industria. Todo lo demás tiene acabados de gran calidad y no es por venderla. La realidad es que todas las superficies están forradas con cuero semi-anilina o con madera de poro abierto. Todos los asientos cuentan con calefacción, ventilación y función de masaje. Además, los fila de atrás cuenta con reposapiés. Así que esta camioneta es lujosa, de una forma discreta y monárquica.
¿Y sí anda bien?
A Colombia llegará solo una versión del Range Rover, la variante Autobiography. Esta trae un motor Ingenium de 6 cilindros en línea twin turbo, que entrega unos elegantes y suaves 400 HP y 550 Nm de torque. Este motor posee asistencia eléctrica, ya que es un híbrido ligero y lo hace exento del pico y placa en algunas ciudades colombianas. Junto a este propulsor viene una transmisión de ZF con 9 marchas. Aunque estas cajas también las usa BMW, en el caso del Range Rover está ajustada para ser tan suave como sea posible, no para ser deportiva. Aun así, alcanza los 242 km/h y llega a los 100 km/h en unos cómodos 5.8 segundos.
Pasemos a la suspensión, que es un logro de ingeniería en sí mismo. Los amortiguadores son de doble válvula y están ajustados para absorber las imperfecciones del camino. Luego está el sistema neumático, que puede ajustar la altura de la camioneta en 76 mm dependiendo del modo de manejo, pero esa no es su única función. Gracias a los sensores en el frente, la suspensión tiene una función predictiva, ya que puede ver el estado de la calle al frente y ajustar la dureza de la absorción. Esto evita que la camioneta se sienta ni muy suave ni muy rígida, para que tenga el andar de una nube.
¿Aún sirve como un todoterreno?
Aunque no lo crea, el Range Rover que llega a Colombia mantiene sus aptitudes todoterreno. Es verdad que no dispone de un sistema de tracción 4×4 como el de toda la vida. Sin embargo, dispone de diferenciales electrónicos con bloqueo en el eje trasero. El sistema Terrain Response 2 ajusta el comportamiento del todo el tren motriz de acuerdo con el terreno seleccionado o que haya detectado. Esta interfaz es capaz de enviar gran parte de la potencia del motor a uno de los ejes para mantener la tracción.
Además, cuenta con dirección en el eje trasero con 7 grados de margen, otorgándole mejor radio de giro. Si necesita cruzar un río, la capacidad de vadeo máxima es de 90 cm y cuenta con sensores que avisan cuando se está alcanzando este límite. En su altura máxima, tiene un ángulo de ataque de 29° y de salida de 34°. Con las llantas correctas y unos rines más pequeños (los de serie son de 22 pulgadas) aún es un todoterreno más que capaz. Y la cosa no acaba aún, ya que pronto llegará la versión de batalla larga y otra versión con motor V8. “¿Y cuánto cuesta todo esto?” se preguntará. Pues, véalo por usted mismo.
Precios y versiones:
- Range Rover Autobiography: $ 1.100.000.000 COP.
