Hoy en día hay fabricantes, como Toyota y Honda, que no están convencidos que el futuro es la electricidad. Por eso es que le apuestan a otras formas, principalmente el uso de hidrógeno como sustituto de la gasolina. Así como ellos hay marcas que se volcaron en un 100% a la estrategia de electrificación y pondrán todas sus fichas y apuestas sobre ella. Tal es el caso de Volkswagen, que confirma una vez más su compromiso ante las declaraciones de su CEO, quién no le ve futuro a los motores a hidrógeno.
Curioso, ya que Porsche, marca que convive bajo el mismo conglomerado, le está apostando a los combustibles sintéticos. Pero eso se resuelve fácilmente: Volkswagen basará toda su identidad en la electricidad y le dejará otras alternativas a sus diferentes marcas. Las palabras vienen directamente del CEO de Volkswagen, Thomas Schäfer, en una conversación con Auto Bild España.
Voltios sí, pero nada de hidrógeno
La entrevista tuvo lugar en el CES de Las Vegas, donde la marca reveló parcialmente al ID.7 eléctrico. Auto Bild le preguntó a Schäfer si Volkswagen tenía espacio para otras tecnologías, como el motor a hidrógeno, pero el hombre fue bastante enfático con su respuesta. “El hidrógeno no es para nosotros, (este) es física pura y costoso. No es competitivo, y menos para los automóviles de pasajeros, cuyos tanques (de combustible) restan en el habitáculo”.
No obstante, Schäfer no lo descartó para vehículos comerciales u otras aplicaciones. Pero ver un auto de pasajeros de Volkswagen con motor a hidrógeno, eso sí no sucederá, al menos durante esta década. Por ahora la marca germana está bien manejando el asunto de autos a gasolina y los eléctricos, preparándose para el momento en el que solo deban concentrarse en desarrollo de modelos eléctricos.
El futuro no será 100% eléctrico
Como ya le mencioné, hay marcas que sí exploran diferentes terrenos y “no se casan” con una única idea. Tiene a Lightyear y sus autos solares/eléctricos. Está el combustible sintético de Porsche, y marcas como Honda, Toyota y BMW exploran conceptos que usen hidrógeno para su movilidad. Es cierto que este elemento necesita tanques de alta presión para guardarlo de forma segura, pero representa una alternativa igual de interesante.
Volkswagen quiere ser una marca 100% eléctrica, y eso está bien. Pero el mundo automotriz no está convencido del todo y por eso explora otros caminos. Innovar es lo que trae tanta variedad y competencia sana. En un mundo ideal, el panorama automotor está compuesto de todo tipo de alternativas para todos los gustos, con una red que los soporte y los haga viables en todas las regiones del mundo. Resta ver qué avances se dan a lo largo de la década, y ver si todas esas alternativas pueden compartir el escenario, o si una de ellas se proclamará como la reina absoluta. Puede que la electricidad ni siquiera sea la fuerza dominante en 10 años.