No es un adiós, sino un hasta pronto. Al menos esa es la impresión que da el fin de producción del mini Clubman, ese modelo station wagon con compuertas dobles en la parte de atrás que cerraba la brecha entre el Mini hatchback y el “SUV” Countryman. Ni una nueva generación salvó al Mini más práctico, dejando en el limbo su futuro dentro de la marca.
Recordará que hace un tiempo reportamos la edición final del Clubman, limitada a 1.969 ejemplares en honor al año del primer Clubman de la historia. Pues bien, por ahora Mini llenará el vacío del Clubman con el “crossover” Aceman que no es un Mini Cooper pero tampoco es tan grande para ser un Countryman. ¿Confuso? Bastante, pero Mini nos da la esperanza que el nombre regresará en algún momento.
Adiós al Mini práctico
Mini logró ensamblar 1.1 millones de unidades del Clubman, cuya producción data de 1969 y que regresó con el renacer de Mini bajo el tutelaje de BMW. El último ejemplar abandonó esta semana la planta de Mini en Oxford, Inglaterra, cerrando sus 55 años de historia y cediendo su lugar al Aceman eléctrico.
Mini no dice si el Aceman, que hoy en día está en sus pruebas finales antes de su lanzamiento, lleve el apellido Clubman. Nombre que inició como un Mini estilo station wagon con el rostro del rediseñado Mini 1275 GT, entrando en su primer “estado de hibernación” hacia 1982. Clubman regresaría con el estilo del original en 2007, incluyendo la compuerta trasera dividida en dos y ese estilo de van de dos puertas adelante.
El ejemplar final del Mini Clubman luce una llamativa pintura color naranja, motor a combustión y el estilo que caracteriza a Mini desde su reinvención en el año 2000. Tal vez extender al Clubman, darle cuatro puertas y evitar que se diferencie claramente del Mini hatchback y Countryman fue la decisión que llevó a su desaparición. Hasta que una próxima hora de nostalgia por el Mini se despierte, buen viaje y hasta luego, Mini Clubman.