Para cerrar el día Volkswagen nos sorprendió con la nueva cara de su modelo más exitoso en toda la historia. Aquí está el Volkswagen Golf 2024, última encarnación del popular hatchback (y station wagon) en llevar un motor de combustión interna o, al menos, ese es el plan de la casa alemana. No es un modelo 100%, sino la actualización de su octava generación revelada en 2019 y que los fanáticos del Golf bautizan “Mark 8.5”.
Fieles a su promesa, el nuevo Golf da un importante salto en tecnología, sin perder la forma general ni silueta presente en la octava generación del Golf. Hatchback que, casualmente, acaba de cumplir sus cincuenta años. La mejor forma de celebrarlo fue con un nuevo modelo GTI con más poder, que exploraremos por aparte en más detalle.
Más poder para los híbridos
Vamos entonces con los cambios globales del Golf, que se ofrecerá en versión hatchback y el más práctico Variant. Volkswagen conserva el modelo híbrido enchufable estándar o GTE, alternativas híbridas ligeras, motores diésel e incluso opciones con tres pedales. Por lo visto, los cambios a las regulaciones Euro 7 permitieron que la transmisión manual acompañe al Golf por un rato más, pero solo en sus modelos básicos.
El Golf de entrada no tendrá un motor de 1 litro turbo, al menos por ahora. La opción más básica usa una unidad 1,5 TSI con 113 o 148 hp y transmisión manual de 6 marchas. Números similares en potencia para el Golf diésel, con la adición de más torque (300 o 360 Nm) y una transmisión tipo DSG opcional. El Golf con combustión pura más poderoso (que no es GTI o R) tiene 201 hp, por cierto.
Siguen los Golf híbridos ligeros, o eTSI, con la misma potencia de los Golf de entrada (113 o 148 hp), pero transmisión DSG de 7 reglajes de serie. Los Golf con enchufe ostentan baterías más grandes de 19.7 kWh, aceptando carga rápida de 50 kW y una autonomía 100% eléctrica de 100 km. El Golf eHybrid ofrece 201 hp, mientras que el modelo GTE divertido asciende hasta los 268 equinos. Como ha de sospecharlo, ambos usan esa transmisión DSG de 7 marchas.
Imagen consolidada… con algunos retoques
Estéticamente el Volkswagen Golf 2024 exhibe sutiles retoques a su diseño. Al frente un logo iluminado complementa la firma LED de los faros y parrilla. Los diodos tanto adelante como atrás exhiben nuevos patrones más elegantes. La parrilla es discreta para los Golf sencillos, mientras que el GTE y GTI lucen una defensa con dos pliegues agresivos a los costados y las luces antiniebla hexagonales integradas en la parrilla.
Detalles como nuevos rines y pequeños retoques en el capó completan esta actualización. Volkswagen no revoluciona al Golf porque eso vendrá con la electricidad, pero sí se cercioran que el último Golf con motor convencional se retire con la frente en alto.
Adiós a lo táctil, hola a los botones reales
Después de mucha crítica por parte de los clientes y nosotros (la prensa), Volkswagen abandona la terca idea de sus mandos táctiles. El nuevo Golf exhibe botones físicos en el volante, tal y como deberían ser. En contraste, la pantalla en el centro del tablero es más grande que nunca, con 10.4 pulgadas para modelos de entrada y 12.9” para los Golf más completos. En Europa tendrá ese asistente vía ChatGPT que ya detallamos en otra ocasión.
El clúster también es digital (10.2”), la pantalla central se puede dividir por funciones favoritas e indispensables y Volkswagen nos dice que el nuevo Golf 2024 se puede estacionar por su propia cuenta, a través de una aplicación móvil.
Todos estos son detalles que permiten que el Golf sobreviva por otros cuatro años más, ante una posible segunda actualización o su desaparición completa, frente la inevitable llegada del Golk MK 9 que, Volkswagen promete, será 100% eléctrico. Resta ver si la casa de Wolfsburgo cumple esa promesa o mantiene vivo al motor de combustión en ese próximo Golf.
