Que alguien le diga a Jaguar que se relaje con el filtro azul. Sabemos que es un color sinónimo de frescura, frialdad y en este caso particular electricidad, pero es algo exagerado y con el último F-Type ocurrió lo mismo. En cualquier caso, Jaguar decidió presentar una actualización del F-Pace híbrido, y si mira más allá del filtro verá que no mucho cambió la verdad.
Así como Opel, Jaguar optó por una estrategia sencilla para la actualización del F-Pace híbrido: baterías más grandes. También hay algunos cambios en la interfaz y los materiales del interior, pero por todo lo demás es el F-Pace enchufable que conocemos desde 2015. Increíble que tenga siete años y no se vea tan anticuado, aunque esta podría ser una de las últimas actualizaciones del modelo.
Toda receta moderna requiere de más baterías
Jaguar tomó al F-Pace P400e, y destapó su conjunto de baterías para agregar 8 módulos más. Con esto, la fuente de energía del F-Pace asciende a 19.2 kWh, otorgando un rango 100% eléctrico de 64 km, 10 más que el modelo anterior. No es mucho, pero es trabajo honesto en especial con las reglas de emisiones en Europa que cada vez son más estrictas. La carga toma 2 horas y media con un enchufe normal, o 40 minutos con corriente directa de 35 kW.
No obstante, la potencia combinada de ambos propulsores no cambió, y se mantiene en 398 hp y 640 Nm de torque. El 0 a 100 km/h se consigue en 5.3 segundos, que suena como una eternidad pero solo considere el tamaño de esta camioneta. Una transmisión automática de 8 velocidades, suspensión independiente, tracción en las 4 ruedas y vectorización de torque son detalles que mantiene toda la gama del F-Pace.
Con paquete siniestro incluido
Estéticamente Jaguar imprimió una actualización sutil al F-Pace híbrido, al igual que el resto de su gama. R-Dynamic S, SE y HSE son ahora los modelos de entrada, con rines de 19, 20 o 21 pulgadas. Un paquete oscurecido (black pack) es estándar en todos los modelos, con apliques negros en espejos retrovisores, rines, insignia, parrilla y molduras de las ventanas.
Todos los modelos reciben panel de instrumentos digital, y tapicería en gamuza es estándar a partir del modelo HSE, al igual que carga de teléfono inalámbrica. Jaguar mantiene la interfaz Pivi Pro presente en sus autos y los de Land Rover (como la gemela del F-Pace, la Range Rover Velar).
Si no le importa salvar el planeta con un híbrido, Jaguar todavía ofrece el modelo SVR con un poderoso V8 supercargado de 543 hp. Con ese podrá acelerar y burlarse de aquellos que usen autos eléctricos, mientras olvida que Jaguar dará ese salto a la electricidad en un par de años.
