De Australia directo al corazón de Las Vegas, no podía faltar la presencia de la icónica Toyota Land Cruiser en el SEMA. En especial porque la serie FJ40 y J70 de la Land Cruiser son una especie de fruto prohibido en Estados Unidos, dado sus números limitados o la ausencia total como es el caso de la J70.
Las tres creaciones son obra de Patriot Games, y lejos de seguir un patrón este trío de Toyota Land Cruiser que se presentan en SEMA son todo menos convencionales. En especial porque una de ellas sigue uno de los gustos más absurdos que existe en Norteamérica: las camionetas 6×6. Claro que no solo Australia ama la Land Cruiser clásica, a la próxima pueden consultar en Medio Oriente o en Colombia, porque allí no sobran versiones únicas y personalizadas.
La vieja confiable actualizada
Como no puede ser de otra forma inicia un clásico: la FJ40. Este proyecto se puede considerar como un restomod, e inicia con una FJ45 pickup de 1977 que mezcla componentes de una Land Cruiser 79 (de ahí el nombre FJ49). El motor, transmisión, suspensión y caja de transferencia provienen de esta Land Cruiser 79, con la estampa clásica de una FJ40 y su robusto chasis.
El diferencial y la suspensión trasera de ballestas fueron mejoradas, con nuevos resortes en el eje delantero. El escape es de acero inoxidable, las defensas lucen ahora ganchos de rescate y un winche; los faros son LED y la cabina posee un refuerzo externo que también funciona como anclajes de carga. Lo demás conserva el estilo original de la FJ45, incluyendo la pintura y defensas oxidadas en un estilo que se conoce como “patina”.
Monstruo 6×6 nipón
En el lado opuesto del espectro se ubica esta enorme creación que se conoce como “Megatourer”. Una camioneta que alguna vez fue una Land Cruiser 79, su chasis fue modificado por completo para recibir un tercer eje. La suspensión ahora es de aire y totalmente ajustable, con nuevos y enormes frenos de disco, así como llantas Mickey Thompson mud-terrain para poder detener a esta bestia.
El motor diésel de 4.2 litros recibió una mejora en su turbo y sistema de inducción para arrastrar su nuevo peso, y no puede faltar el snorkel para vadear ríos. También hay barras de luces LED, anclajes para llantas de repuesto, winche delantero y trasero; además de un tanque de combustible adicional y reserva de agua de emergencia. Un refrigerador, radio Alpine y asientos en cuero napa le dan un sabor de comodidad a este vehículo, que por cierto tiene paneles solares, compresores y generadores abordo.
Más “normal” pero igual de capaz
Para cerrar este trío de Toyota Land Cruiser que visitan SEMA, está el proyecto Supertourer. Conocida como “la camioneta negra”, es una Land Cruiser 70 doble cabina con una caja de carga cerrada útil para transportar todo tipo de cosas al final del mundo. Su chasis está estirado para maximizar este área de carga y dar espacio a un refrigerador, cocina, sistemas de navegación y tienda de campaña.
El motor, suspensión y rines de fábrica recibieron mejoras para hacerla más capaz en todoterreno; junto a un snorkel e iluminación LED. Esta Land Cruiser puede juntarse a un remolque especial de Patriot Campers que posee calefacción, corriente eléctrica, toldo retráctil, otra cocina y tanques de agua y gasolina auxiliares. En pocas palabras una casa sobre ruedas.
