Sí usted es fanático de la velocidad en dos ruedas, seguramente cree que el mejor de todos los tiempos es Valentino Rossi. Aunque por estos días el hombre pilota algo con cuatro ruedas, concretamente un BMW M4 GT3 y es por tal razón que la casa bávara nos presenta esto. Quizá el Bimmer más coleccionable de tiempos recientes, este es un M4 CS edición VR46.
Ayuda que BMW tiene su propia división de motocicletas, así no compitan en Moto GP. Porque con este M4 que homenajea a Valentino Rossi, BMW une lo mejor de dos mundos. ¿Lo mejor? Invertir en uno le permitirá conocer en persona al “Doctor”, apodo que tenía Rossi en sus días mozos de Moto GP.
Los colores de il dottore
Sí ignora al ultra limitado 3.0 CSL moderno, este homenaje a Valentino Rossi es el BMW M4 más caro de la historia.
Por supuesto los costados tienen un enorme número 46, que aún utiliza el italiano en competencias. BMW hará 92 ejemplares, 46 en azul marino metálico y 46 en Frozen tanzanite metálico. En esencia dos tonalidades de azul combinadas con acentos en amarillo fluorescente, combinación de tonos típica de Valentino durante su carrera como piloto.
Detalles como los rines, mordazas de los frenos, bordes de las ventanas y costuras interiores lucen ese amarillo Sao Paulo tan vistoso. Elementos del exterior tienen fibra de carbono expuesta y patrones especiales en el techo, con detalles negros para darle una apariencia más siniestra a este M4. Abundan los logos VR46 en los asientos, estribos y una placa especial.
Bimmer para conocer a Rossi en persona
El otro detalle del BMW M4 que aquí ve es la oportunidad de conocer a Valentino Rossi en su “Motor Ranch” ubicado en Italia. Además de compartir una barbacoa con el piloto, al siguiente día lo acompañará al circuito Misano a probar ese M4 CS tan especial. Porque al final del día, la gracia de este BMW es usarlo como merece, en pista.
Mecánicamente no hay novedades en este BMW de 155.000 dólares americanos. Se mantiene el motor 6 en línea de 3 litros con dos turbo, que entrega 543 hp, con tracción total, una transmisión automática de 8 marchas, modo drift y un 0-100 km/h por debajo de los 3,5 segundos. Con suficiente pista recta, llegará a los 290 km/h y eso con su limitador.
No es precisamente el M4 que Rossi usa en competencias de resistencia, pero es lo más cercano que tendrán los mortales.
