Por ahí dicen que Latinoamérica es una tierra de contrastes. No obstante, quien lo dijo no conocía Venezuela, un país que, en plena crisis económica, importa un par de unidades del Ferrari Roma, una gris y otra en color azul. Tal vez recuerde el escándalo del concesionario que abrieron en Caracas y que después de una investigación resultó no ser tan nuevo. Pues este caso es similar, porque estos Ferraris no son los primeros en llegar al país bolivariano, ni los más caros.
El primero en publicar la llegada de este par de Ferrari Roma a Venezuela fue la cuenta de Instagram de Perfectcasve. Esta cuenta se encarga de publicar avistamientos de autos de alta gama en su territorio. Luego de que ellos lo publicaran, el periodista Federico Black le dio eco al tema resaltando el problema social de Venezuela y las sanciones que se le pusieron a aquel país. Además, publicó que el precio de estas unidades era de 310.000 dólares. Otra vez hubo que echar un ojo para ver porqué esta información no es del todo exacta.
Los superautos del vecino
El asunto de la escasez en Venezuela es un tema que es polémico todos los días y por eso la llegada de estas unidades del Ferrari Roma es un asunto candente. Sin embargo, en ese país las cosas siempre son más complicadas de lo que parecen. No vamos a debatir la disponibilidad de recursos básicos para el público, pero en esas tierras los superautos no faltan. Solo basta con bajar un poco en la misma cuenta de Perfectcasve y otras relacionadas para ver que hay varios Ferraris, Porsches y otros superautos modernos allá. Uno de ellos es un Ferrari 599 GTB con un valor estimado de 299.000 dólares.
Un lío económico
El tema del precio también es debatible porque el valor del Ferrari Roma de las fotos no cuadra con el valor internacional. El periodista Federico Black utiliza como referencia un medio mexicano para hablar del valor y lo establece en 310.000 dólares. El problema es que, a nivel mundial, el precio del Roma inicia en 222.620 dólares y esto está comprobado con varias publicaciones internacionales. A ese precio hay que sumarle las opciones, los impuestos, los costos de importación, el transporte y las comisiones. Eso sin saber si estos autos los importó Maranello Motorsports o fue un tercero, lo que dificulta más hacer el cálculo.
Al final, la llegada de este par de Ferrari Roma a Venezuela no ha dejado de causar polémica en las redes. Por el momento no se sabe quién será el dueño o con qué recursos se pagó. Tampoco se sabe si se van a quedar o si solo van de paso. Es verdad que es un reflejo de la desigualdad económica de la población, pero este efecto se ve en todos los países del globo, en especial los del tercer mundo.
