Cuando Acura trajo el nombre Integra de regreso se encontró con opiniones divididas. Quizá todos esperaban que el nuevo recipiente del nombre fuera un cupé deportivo con un poderoso motor V-TEC, algo que siguiera el linaje del Integra Type R que todos aman. Pero como ocurrió con el NSX, la realidad fue distinta. Pocos recuerdan que el Integra es, desde su concepción, un modelo para llenar el vacío entre el Civic y el Accord, con una pizca de deportividad espolvoreada encima. Y eso fue lo que obtuvimos en tiempos modernos, así no le caiga en gracia a todo el mundo. Quizá ahora sí lo tomen en cuenta, porque el Acura Integra Type S es ese modelo deportivo que muchos esperaban.
Esta vez la historia se invierte. De regreso a los años noventa fue primero el Integra Type R, cuyo éxito llevó a que Honda le aplicara un tratamiento similar al Civic. 25 años después es el actual Civic Type R el que presta sus entrañas para darle forma al Acura Integra Type S. Sí, así con otra letra para diferenciar a los más juveniles de las damas y los caballeros. En esencia esa es la idea tras este Integra: mezclar desempeño con un toque de distinción y aroma premium en un sedán (o cupé de 4 puertas) ligeramente más grande y hasta discreto.
Manual, turbocargado y con V-TEC
Tal vez usted no lo sepa, en parte porque no recibimos al Integra en Latinoamérica, pero es un modelo bastante especial. Es de los pocos en esta era que aún ofrece transmisión manual. No solo eso, su versión más equipada se ofrece exclusivamente con tres pedales. En ese sentido, el Type S llega a ocupar ese pedestal como la versión definitiva del Acura Integra, y sí tiene un transmisión manual de seis marchas.
Como ya le mencionamos, su tren motor y chasis es idéntico al del Civic Type R. La diferencia es que Acura afinó un poco ese motor turbo de 2 litros (con V-TEC) para exprimir otros 5 caballos de potencia, gracias a lo que Acura llama un “escape de mayor flujo”. En total son 320 hp y 420 Nm de torque (el mismo del Type R), y si bien la diferencia es mínima, el Integra es 14 kg más ligero. Nimiedades al final del día, ya que ambos modelos están dirigidos a un público “distinto”.
El Type S también incluye otras mejoras en desempeño. Como diferencial de deslizamiento limitado, refrigeración de motor mejorada, rines de 19”, trocha ensanchada (7.1 cm más), frenos brembo y escape triple. También hay cambios en la aerodinámica, con un difusor y spoiler en la compuerta trasera, toma de aire en el capó y suspensión independiente adaptativa. Esta última muy similar a la del Civic Type R y quizá lo que le faltó al Integra Type S para diferenciarse más era la opción de tracción en las cuatro ruedas. Tal vez en otra ocasión.
Type R con esmoquin
Usted notará que mencionamos que este Acura va dirigido a otro público en contraste al Civic. Sí, ambos autos son sorpresivamente similares, pero el Type R claramente va a un público más juvenil. Uno que no se asusta por el enorme alerón, los detalles exagerados o la apariencia de un joven peleador de la UFC. En cambio el Integra Type S es un vehículo más sofisticado, más maduro. Es para asistir a un evento en traje y tener la capacidad de lucirse, como John Wick. Acura le apunta a rivales alemanes como el Mercedes-AMG A35 o CLA 35, Audi S3 o BMW M135i, y si su precio está por debajo de ellos, es un prospecto interesante.
En cuanto al interior no hay mucho que agregar, es una experiencia más distinguida que el Integra que lo antecede. Hay sonido premium envolvente, sillas tipo cubo con gamuza y cuero microperforado, todo tipo de asistencias de manejo y seguridad y head-up display. Todo eso es muy interesante, pero nada como el pomo de la palanca de cambios en aluminio anodizado para enfatizar que este es un deportivo manual a la vieja escuela como nos lo merecemos.