Mercedes-Benz sacó los pesos pesados en Múnich. El IAA de Múnich (antes Fráncfort) fue el escenario en donde la marca presentó una plétora de modelos. Después de todo, están en suelo local, ¿por qué no ir con toda? Entre los tantos vehículos eléctricos, que presentó la casa germana, uno destaca por su opulencia y su nombre. “Casi listo para producción”, MB revela el Mercedes-Maybach EQS concept, un SUV eléctrico exclusivo y lujoso, con un diseño y equipamiento para darle envidia a Rolls-Royce o Bentley. Un rápido vistazo a este concept car revela que, en el futuro, Mercedes-Benz planea hacerle frente al Bentayga y al Cullinan… y de paso al SUV de Ferrari. Sólo que con el poder eléctrico de su lado.
Mercedes-Benz apunta este nuevo concepto de opulencia eléctrica a una nueva ola de clientes más conectados con lo digital, o sea jóvenes billonarios que desean un vehículo en el cual ser transportados. Especialmente aquellos en Rusia, China, Corea del Sur, EE.UU y Alemania, países clave para la casa germana. Mercedes-Benz aspira a una autonomía de 600 km entre carga y carga, más que suficiente para ir al campo de golf, a las oficinas centrales de la empresa, y a los clubs underground de electrónica.
La elegancia hecha SUV eléctrica
El Mercedes-Maybach EQS Concept utiliza la misma plataforma del EQS, que en el futuro recibirá una versión SUV. Sólo que con un estilo exclusivo. El frente posee una parrilla en forma de cascada, con lo que casi parece la sonrisa de una ballena. Tal vez Mercedes-Benz “se inspiró” en el Lincoln MKT y MKS de hace unos años, llevando su diseño al mayor extremo. Las luces frontales y posteriores adoptan un diseño discreto, en contraste con los rines Maybach Bowl de 24 pulgadas. La carrocería es a dos tonos, con el pilar B estampado con miles de logos de Maybach, como si fuese una cartera Gucci. Tal vez no nos guste, pero después de todo este concepto está diseñado para personas con cuentas de más de 10 dígitos en el banco. Y al parecer, esto es lo que les gustará en el mañana.
Por supuesto, la experiencia MBUX de Mercedes-Benz domina el tablero, el cual es literalmente una pantalla gigante. Sólo que, en vez de tener el habitáculo de un auto como los demás EQ, el Maybach tiene una sala de estar tipo mansión. Cada silla es individual, con apoyabrazos y zonas refrigeradas para cargar copas y champaña. El techo es panorámico, con todo tipo de controles eléctricos para no mover un solo dedo. Hay dos pantallas sólo para los pasajeros de atrás, mesas plegables y hasta espacio para un florero de lujo entre las sillas traseras. Todo con un acabado de textiles lujosos, cuero blanco e insertos dorados palo de rosa. Ya sabe, toda la parafernalia para alguien con alcurnia.
¿Cómo lo ve? Quizá lo ve demasiado exagerado y ridículo. O tal vez, es precisamente lo que el buen gusto necesita, con ese apartado ecológico que sólo puede brindar un auto eléctrico. Mercedes-Benz no planea llevar (aún) a producción este one-off, pero tal vez es la prueba suficiente para que los magnates petroleros finalmente tengan la convicción que un auto eléctrico es igual de magnífico y único que su limusina impulsada por fósiles. Diría que nos encantaría probar uno en Fuel, pero primero se congelan de nuevo los polos antes que veamos una de estas por aquí.
