Vengo a traerle la peor de las líneas de tiempo imaginables para aquellos que aún tienen fe en Mitsubishi. Fe de que vuelvan a ser la marca jovial y dinámica que alguna vez fue, con todo tipo de nombres divertidos como Mirage, Lancer Evolution, Eclipse, 3000 GT y Montero/Pajero. La realidad es distinta hoy por hoy, porque Mitsubishi es parte de Renault-Nissan, lo que automáticamente significa compartir plataformas y modelos, como es el caso de este Lancer imaginario basado en un Sentra.
Cuánto claman los entusiastas por el regreso del nombre Lancer (y por extensión la versión Evolution), a ellos les digo cuidado con lo que desean. Porque desde un punto de vista financiero un Mitsubishi Lancer que no sea nada más que un Nissan Sentra (o algún Renault) puede ocurrir. Es más, no se sorprenda si ya alguien en el grupo Renault-Nissan tuvo esa idea y está presentándosela a la gente de Mitsubishi. Como dice Batman y Harvey Dent: es mejor morir joven como un héroe que vivir lo suficiente para transformarse en un villano.
Producto de un retorcido universo paralelo
Tranquilo que es solo un render, pero presenta una realidad tangible que ojalá es mejor se quede solo en la imaginación de los artistas como Theottle. Imagen y video que no son nuevos, por cierto, fueron una sugerencia que encontró este autor en Instagram y que motivó a explorar esa posibilidad del regreso del Lancer como nada más que un Nissan con otra cara. Ya pasó con el Colt que es un Renault Clio y el ASX que no es más que un Captur.
El artista usa la fascia y detalles de la minivan/crossover Xpander para extraer ese diseño corporativo de Mitsubishi y adaptarlo a las líneas del Sentra. Que, al final del día, no es un mal producto pero no es particularmente emocionante. ¿Lo mejor (o peor)? El diseño funciona, haciendo que el “hipotético” Lancer se vea futurista e incluso con un mejor aspecto que el Sentra, en especial hacia la caída del techo y parte trasera. Si no tuviera ADN de Nissan, bien podría ser el retorno del Lancer como sedán sensato para en unos años adoptar el nombre Evolution XI e incomodar al Subaru WRX. Además, es más esfuerzo que esos Colt y ASX cuya única novedad son los logos.
De nuevo, existe una gran posibilidad que esto ocurra considerando la dirección que asume Mitsubishi por estos días. No me malinterprete, compartir plataformas entre marcas no es una mala idea, la misma Mitsubishi lo aplicó a la perfección con la nueva L200, que usa la base de la Nissan Frontier pero motores, tecnología e identidad 100% Mitsubishi. El problema es cuando, para recortar costos, se toma un modelo existente y se cambian algunos logos y molduras para crear “un nuevo modelo”, como sugiere este render con un Lancer que ojalá solo viva en la imaginación y no sea real. Repita conmigo: el Mitsubishi Lancer Sentra no existe, no nos puede hacer daño.
