Seguro estará preguntándose por el título que abre este texto. No me malinterprete, si lleva uno de estos poderosos sedanes a un circuito va a divertirse como nunca. Pero para ser una “edición de pista” no hay muchos cambios que justifiquen la emoción de quemar llanta en su circuito local. Así que acompáñeme a ver por qué, y qué hace tan especial al Cadillac CT4-V Blackwing Track Editions.
Quizá no lo sepa, pero Cadillac tiene una rica historia en los deportes a motor. Particularmente en años recientes, donde sus prototipos Daytona (o DP-i) han dominado en las competencias de IMSA. Incluso, están preparando un prototipo hypercar para Le Mans en años venideros. Así que Cadillac quiso celebrar esos triunfos con una versión conmemorativa del CT4-V Blackwing, de ahí la importancia de estos “Track Editions”.
Primera parada: Sebring
En concreto, las versiones Track Editions del Cadillac CT4-V Blackwing celebran tres circuitos norteamericanos: Watkins Glen, Road Atlanta y Sebring. Cada una de ellas ofrece toques estéticos especiales relacionados con la pista en cuestión. Así que iniciemos con una de las cunas del deporte norteamericanas por excelencia: Sebring.
Allí se disputan las 12 Horas de Sebring, carrera que comienza muy en la mañana y termina en medio de la oscuridad, por eso el CTV-4 inspirado en esta pista tiene toques más siniestros, para representar la caída del sol y final de la carrera en la noche. El tono negro se denomina Maverick Noir Frost, complementado por un interior en cuero negro/gris con acentos rojos, o una tonalidad café.
Las sillas tipo cubo adelante reciben más fibra de carbón y acentos rojos, los estribos de las puertas hacen alusión a Sebring y hay placas numeradas en el volante. Su exterior posee una calcomanía con la silueta de la pista, logos de IMSA y calcas con banderas a cuadros completan el retoque estético. Esto aplica para todos los modelos, solo que el modelo Sebring es oscuro y tiene mordazas de frenos color bronce.
La parada de bus nos indica: Watkins Glen
Sigue uno de los circuitos preferidos por este servidor, en especial en videojuegos o simuladores. Watkins Glen y su icónico bus stop o parada de bus, es la casa de una carrera de resistencia de seis horas, que se celebra desde 1948.
Si bien el Cadillac CT4-V Blackwing que representa a Watkins Glen tiene los mismos elementos cosméticos del anterior; su exterior ahora es de un electrizante azul, tono que se extiende a las mordazas, en honor a las barreras azules que adornan la pista. El interior vuelve a ser negro con gris, o negro con café.
Todo termina en Road Atlanta
“Petit Le Mans”, como se le conoce a Road Atlanta, es el último circuito en ser homenajeado, hogar de la última carrera del calendario de IMSA. Cadillac suma tres victorias al hilo en esta prueba de 10 horas, y el CT4-V Blackwing Track Editions que lo homenajea es el único con un interior exclusivo.
El tono blanco perlado del exterior hace honor a “la topografía, sofisticación y paisajes de Braselton, Georgia”, con un interior en negro/gris o rojo adrenalina. El exterior también adopta ligeros acentos rojos en los faldones y espejos, único de esta versión. Hay que destacar que la marca hará 99 unidades conmemorativas de cada pista, entre octubre 2022 y marzo 2023.
Por todo lo demás, estas versiones para la pista no traen una interfaz revisada con gráficos de más desempeño, una caja de cambios especial, frenos o suspensión mejorados, o más potencia. Así que espere el mismo V6 biturbo de 472 hp y 603 Nm de torque, una caja manual de 6 marchas y 0-100 km/h en 3.8 segundos. Al final del día, un sedán muy capaz y deportivo, con el disfraz de una simple edición especial que pudo tener mucho más picante.
