Seamos sinceros, aunque el rosso corsa de Ferrari es muy emblemático, a un Cavallino le quedan muchos otros colores. Tome como ejemplo a Michael Schumacher, de estilo muy excéntrico en sus días, que eligió una preciosa tonalidad azul para su Ferrari F355. Primer modelo de calle que recibió a su llegada a la Scudería en 1996 y que ahora sale a la venta.
Podría decirse que Schumi era el ícono de la moda en la parrilla cuando Lewis Hamilton apenas era un niño. Además de festejar a lo loco, el alemán era un personaje bastante peculiar. Si bien su Ferrari F355 GTS no es tan estrambótico, Michael Schumacher eligió una configuración bastante única a la hora de “ordenar” su primer regalo de Maranello.
Primer Cavallino del campeón
En términos de un F355, este es quizá uno de los más lindos que verá en su vida. Lo tiene todo, es la versión targa (GTS), un exterior blu Le Mans con una cabina en una tonalidad Pella Crema clara, bastante elegante. Lo único que le falta es un Schumacher al volante con una Famke Janssen de pasajera y una bufanda compitiendo contra un Aston Martin DB5.
Schumi recibió su F355, con ese V8 de cigüeñal plano tras la cabina entregando 375 hp, hacia abril de 1996. Y lejos de tener la transmisión F1, posee la fantástica opción manual de 6 cambios. Todo un carro de entusiasta, pero qué se puede esperar de alguien que tuvo un Bugatti EB110.
El heptacampeón usó su F355 GTS por varios años alrededor de Mónaco, finalmente vendiéndolo hacia 2002. Seguramente ya iba a recibir un Enzo y por eso tenía que hacer espacio en su garaje.
Historia impecable
El F355 cambió un par de veces de dueño, hasta que en 2004 un empresario belga se hizo con el flamante deportivo. Y lo conservó por dos décadas, cuidándolo con recelo y usándolo a menudo, porque el F355 acumuló kilometraje como un auto normal. Actualmente su odómetro lee unos 47.000 km recorridos.
Su dueño lo llevó a diferentes concursos e incluso adornó varias revistas y publicaciones. Hasta tuvo una serie limitada de modelos a escala (1:43) de Minichamps. El hombre tuvo la oportunidad de charlar con Michael Schumacher en sus días de Mercedes y el campeón aún recordaba con estima su Ferrari F355.
Para hacerlo aún más coleccionable, el F355 tiene un certificado de originalidad emitido por Ferrari, que incluye su historial de servicio y conexión con Schumi. Quizá no demande siete cifras (en euros), pero alguien se llevará a casa un Cavallino bastante especial y que bien podría superar los 100 a 150.000 euros. La subasta e imágenes son cortesía de RM Sotheby’s, por cierto.
Si está buscando excusas para probar suerte en la lotería, quizá este sea el momento, ¿no?
