En Bogotá pasan historias de nunca acabar, en cuestión de seguridad en las vías para los conductores. La última noticia va de la mano con un monumental hecho protagonizado por más de 30 conductores parqueados por una de las avenidas más importantes de la capital; debido a que sus carros fueron pinchados en un recorrido de menos de 10 cuadras.
En pasadas ocasiones, el modus operandi de los ladrones eran los llamados rompevidrios que atormentaron a los ciudadanos en varias zonas de Bogotá; sorprendiendolos en los trancones y semáforos para hurtar las pertenencias. Posterior a eso, se dieron los robos a mano a armada en los semáforos a quienes llevaban los vidrios abajo y ahora vuelve la táctica de los pinchallantas en las avenidas bogotanas; colocando elementos en las vías para que los carros resulten pinchados y tengan que detener su marcha.
El último caso en específico
Presentado en la noche del domingo 9 de febrero de 2020; en la avenida 68 en sentido norte-sur, entre las calles 13 y tercera. Alrededor de 30 vehículos entre particulares y taxis resultaron con una y más ruedas pinchadas; estacionados a un costado del carril central de esta avenida, tratando de solucionar el impase del pinchazo. En un comienzo se hablaban de tachuelas o elementos regados en la calle. Luego de esto, la policía de acuerdo a los hallazgos, encontraron un tubo hueco, con una punta filosa, clavado en un orificio de una alcantarilla; con tan mala suerte para los conductores que pasan por este lado, resultaron reventando las llantas.
Afortunadamente en medio del mal sabor del momento, ningún conductor resultó asaltado en sus pertenencias por ladrones a mano armada aprovechando este caso. Por el contrario, vuelven a actuar los montallantas de la zona; los cuales posiblemente le pagaron a habitantes de calle para que instalaran estos elementos en la avenida y así generar que los conductores llegaran a despinchar a sus locales y hacer el agosto. Realmente un acto bastante grave ya que con un pinchazo de estos a una velocidad moderada puede generar un accidente, aún más, en cadena teniendo en cuenta la cantidad de vehículos estacionados. La mala fé de los «montallanteros» no tiene escrúpulos de nada, ocasionando estos hechos.
Pequeños consejos para estos caso: tener la rueda de repuesto bien inflada y en buenas condiciones, puede ser una gran ayuda; estacionar donde haya una buena cantidad de personas o si es posible buscar una estación de servicio, a veces es preferible estropear una rueda que exponerse a otras cosas y lo más importante, si tiene seguro todo riesgo, hacer uso de ello para evitar inconvenientes.
