Mazda-Miata-Aston-Martin-DB7-WTF
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¿No le ha pasado que está en sitios como Facebook Marketplace y se topa con cosas totalmente bizarras? Esta es una de esas ocasiones. Lo que aquí ve es una “réplica” de un Aston Martin DB7, construida sobre lo que alguna vez fue un Mazda Miata o MX-5 de primera generación. Y déjeme decirle que es una conversión demasiado extraña y que solo tiene sentido ante los ojos de su creador.

Alguien tendrá la oportunidad de comprar este híbrido entre un Mazda Miata y Aston Martin DB7 por un valor de 5.500 dólares americanos. Francamente es un precio demasiado alto para ser lo que es; aunque es un valor relativamente “bajo” para lo que de cualquier otra forma es un Miata en buen estado. Puede que no lo crea pero el Miata original es un modelo bastante codiciado, y los precios de uno en buen estado pueden rozar los 50.000 dólares.

Para los gustos no hay disgustos, reza un dicho por ahí.

Cuando un Mazda y un Aston se quieren mucho…

Aparentemente este es un kit de conversión que alguien se inventó para hacer del Miata un Aston Martin, que se denomina AMX07. No sería la primera ocasión que el Miata es usado para creaciones que rinden tributo a los biplazas deportivos británicos. Y en términos de bodykits, existen muchos para hacer que un Pontiac Fiero o Toyota MR2 imiten a algún Ferrari. Hay personas que les gustan los autos así, y es respetable. Lo irónico es que por esa época del Miata NA, Ford era dueña de Mazda y Aston Martin.

Este ejemplar en particular es un Miata de 1993, dotado con un motor 4 cilindros aspirado y 1.8 litros que produce 130 hp. La cara inocente del MX-5 da paso a un intento de parrilla de Aston Martin (¿O Ford Fiesta?) y unos faros fijos en vez de retráctiles. Aparentemente todo el bodykit está hecho de fibra de vidrio, modificando los pasos de rueda con una parte trasera que intenta imitar un Vanquish de alguna manera. Es un aspecto llamativo para solo unos pocos, y aparentemente su dueño tenía bastante aprecio a su Aston Mazdin, ¿o Mazton Martin?

Por todo lo demás es un Miata normal, con esa fiabilidad y diversión que son tan características. El motor 1.8 tendría unos 160.000 km recorridos, un nuevo embrague más ligero y barras estabilizadoras adicionales. Además es manual, lo que lo hace perfecto para los más entusiastas o puristas. Ciertamente es una conversión bizarra para muchos, pero quiénes somos para cuestionar los gustos de algunos.

Al menos es manual y su interior es, en su mayor parte, original.
Andrés Suárez
Cine🎬/Fotografía📸/Autos🚗. A veces hablo locuras sobre carros en Fuel Car Magazine.

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