Ah, los años noventa:una época en la que todo 4×4 (o campero, o crossover) tenía una versión convertible o con techo suave porque ir a la playa o ser surfista era lo máximo. El Suzuki Jimny no fue la excepción a esta tendencia “convertible”, aunque dependiendo de donde viva, usaba algún nombre como Maruti Gypsy o Chevrolet/Suzuki SJ o Samurai. El problema es que su versión moderna (con sabor retro) no tiene variante descapotable, pero eso cambia hoy.
Gracias a la locura que es la industria automotriz china, el Suzuki Jimny ahora tiene su variante convertible y no es lo que usted se imagina. Es cierto, es un Jimny sin techo pero tiene bastantes detalles bizarros, empezando por su nombre: Conscience (o consciencia en inglés). Ah y está inspirado en una marca que se llama Wey, famosos no por su nombre mexicano sino por su copia del Ford Bronco.
Copia de una copia de una copia
Este Suzuki Jimny Convertible llega cortesía de un youtuber conocido como Wheelsboy, quien se dedica a encontrar las mayores rarezas del mundo automotor chino. El modelo se conoce (además de consciencia) como Wey Tank 100, que técnicamente no existe pero sí existe. Ni Wey o Great Wall lo producen de forma oficial, pero es una modificación hecha por YiChe Garage inspirada en las creaciones de Wey.
Tenga en cuenta que el Jimny no se vende en China, así que YiChe tuvo que importar uno, tarea que resultó en unos 60.000 dólares de gasto. Acto seguido, sus creadores copiaron el rostro del Bronco y lo acomodaron como pudieron en el Jimny, justo como el Wey 300/P01. Solo que en vez de Suzuki o Ford dice “CONSCIENCE”, y aparentemente ello es un juego de palabras en China.
Jimny con un estilo cuestionable
Si el frente le parece bizarro, no ha visto nada. Sus creadores intentaron imitar al Brabus Jimny, con su tapicería de cuero con patrón de diamante y rejillas de ventilación de AMG. A pesar de ser lujoso, se supone que este auto mantiene su espíritu aventurero, así que tenga cuidado al quitar el barro de estas sillas lujosas.
Y luego está el techo, o más bien la ausencia de él. Luego de un buen rato jugando con la sierra eléctrica, YiChe intentó crear un techo suave pero no lograron hacerlo encajar. Así que pusieron una cubierta sencilla para guardar el auto, solo que la lluvia se filtró y cuando Wheelsboy lo condujo la cabina estaba “empapada”. Aún así según sus impresiones de manejo el chasis mantuvo su rigidez y no tiene las propiedades físicas de una tortilla. Así que técnicamente este Suzuki Jimny no es un convertible sino un roadster.
Hay que aclarar que además del costo del Suzuki, YiChe gastó otros 60.000 USD aplicando todas estas modificaciones (y sí eso incluye los logos personalizados en el volante y sillas). ¿Vale la pena el esfuerzo? Bueno, por 120.000 USD hay mejores opciones de Ford, Jeep o incluso un Suzuki clásico. Pero nadie podrá decir que tiene un Jimny moderno convertible como sí pueden los genios (o locos) tras esta creación.
