No señor (o señorita), la T no significa targa, pero sí es el regreso de un modelo que data desde los inicios del favorito de Stuttgart. Hablo del 911T, o debería decir Carrera T, que debuta como una opción más pura y enfocada dentro de la escalera de Porsche. En concreto, un modelo que se ubica entre el Carrera “a secas” y la versión S, con una pizca de mayor “pureza y diversión” para diferenciarlo de otros 911.
Usted sabe que Porsche le encanta romantizar su pasado, y el 911 Carrera T era la excusa perfecta para hacerlo. El 911T original era la versión de entrada del modelo, luego de que el 912 de 4 cilindros fuese descontinuado. En esencia usaba el mismo motor 2.0 del 911 y 911S, sólo que “restringido” a 110 hp, potencia más que suficiente en 1967. Lo curioso es que este nuevo 911 debuta justo antes de la actualización (992.2) que recibirá el modelo, o tal vez el Carrera T es ese facelift y es tan sutil que nadie se dio cuenta.
¿El Porsche moderno más puro?
Vamos a los números, porque cuando de deportivos alemanes se trata allí reside la “carne de este asador”. El Porsche 911 Carrera T utiliza el mismo motor del Carrera: una unidad bóxer de 6 cilindros con dos turbos, 380 hp y 450 Nm de torque, que viajan a las ruedas traseras gracias a una caja manual de siete velocidades. Sí, lo leyó bien: “manual”, aunque la opción secuencial PDK del Carrera base permanece como opción, nadie quiere eso a menos que sea un 911 GT3 RS.
Porsche dice que el 911 Carrera T es un auto “hecho para entusiastas”, y mezcla las mejores partes del Carrera y Carrera S. Para empezar, toda la insonorización se va a la basura, al igual que la silla trasera (que es opcional) y los cristales que ahora son más delgados, ahorrando 45 kg de peso.
Vectorización de torque, suspensión activa PASM y el paquete Sport Chrono son algunos de los juguetes que este 911 Touring pide prestado del Carrera S, con dirección en el eje trasero como un “extra” opcional. Quizá este sea el 911 moderno más puro, detrás del fantástico Sport Classic, aunque ese auto es una pieza inalcanzable para muchos.
Desempeño subestimado
Del Carrera S también provienen los rines de 20” adelante y 21” atrás con acabado en gris titanio, al igual que un volante y escape deportivo. No pueden faltar los logos retro plasmados en los parales de las puertas y hasta en los apoyacabezas. Con todos estos cambios, el 911 Carrera T detiene la balanza en 1.470 kg, que no suena a mucho pero es suficiente para hacerlo más rápido de 0 a 100 km/h.
¿Qué tanto? Porsche dice que 4.3 segundos, pero considerando que los alemanes suelen ser generosos con sus cifras, fácilmente el 911 Carrera T está por debajo de los 4 o 3.5 segundos. Además, este auto es para divertirse en eventos de time attack o en algún circuito, sin el costo prohibitivo de un 911 GT3 RS o Cayman GT4 RS. Claro que este 911 sigue siendo un exótico con un valor que supera los 118.000 dólares. ¿Suficientemente purista para usted?