Mientras Rezvani está en Occidente modificando vehículos enormes como Cadillac Escalade o Jeep Wrangler, en Japón prefieren crossovers para sus autos rudos. Este tanque solía ser una Toyota RAV4, que pasó por las manos de Kuhl Japón para transformarse en un tanque urbano listo para sobrevivir al apocalipsis. Todo con la fiabilidad de un Toyota, y lo conveniente de un crossover más “pequeño”.
Claro que todo esto es entre comillas, porque las modificaciones de Kuhl para transformar esta Toyota RAV4 en un tanque son bastante notorias. ¿Sabe algo? Este es el digno sucesor del Toyota Mega Cruiser, ese intento de Japón por recrear (y superar) al Hummer H1 o Humvee. El ejército japonés bien podría adoptar esta RAV4 para equipar a sus fuerzas armadas, y lo mismo en Latinoamérica ya que Toyota gusta tanto por esta región. Las metralletas no parecen estar incluidas o ser una opción como tal.
Un acorazado en el Auto Salón de Tokio
Kuhl no es ajeno a modificar autos de Toyota, pero en comparación su anterior RAV4 era normal y no un tanque urbano, o tanqueta si prefiere. El preparador japonés usa la RAV4 con el paquete TRD off-road de fábrica, que agrega llantas todoterreno y una suspensión levantada. La transformación inicia con un nuevo rostro, con defensas más utilitarias y con mejor ángulo de ataque. La parrilla está oscurecida y luce el nombre de esta modificación: VRAVRA. Quizá lo único que Kuhl deja de fábrica son las farolas frontales y el tren motor de la RAV4, que puede ser híbrido o a gasolina convencional.
El preparador también instala sus propios rines utilitarios, así como cauchos Dunlop Grantrek AT5. Los costados no se parecen nada a su contraparte de producción, con muchas molduras plásticas y arcos de rueda ensanchados, imitando una armadura real. La parte de atrás corona este aspecto con una defensa igual de utilitaria y hasta un spoiler más deportivo. Del interior no pudimos ver fotos, pero Kuhl dice que se limitó a instalar su propia tapicería y nada más.
Parece algo excesivo para un crossover, pero las mismas marcas ofrecen sus versiones aventureras de estos modelos. Toyota tiene una RAV4 off-road, Honda una CR-V aventurera, y Mazda creó a la CX-50 para tal fin. En comparación, la RAV4 tanqueta es lo mismo solo que con un estilo de vehículo militar. Y hay un público para un juguete de esas características, siempre y cuando tenga los 17.000 USD que cuesta la conversión, además de la RAV4 donante. Ahora, ¿es bonita esta RAV4? Tenemos opiniones divididas, pero eso es lo bonito del mundo motor: hay un público para todo.