Crucemos todos los dedos, pero no para que ya sea 5 de marzo. Fecha en la cual Dodge revelará el nuevo Charger SRT, luego de destapar imágenes sin camuflar para generar ruido antes de su lanzamiento. No, lo que desean muchos (me incluyo) es que ese Charger esté potenciado por un motor a combustión, tal y como merece un muscle car de su calibre.
La noticia fue reportada por Motor1 y confirmada por los colegas de Car&Driver, quienes recibieron confirmación oficial de Dodge respecto al lanzamiento del Charger SRT. Considerando que la marca se atrevió a mostrar el auto sin camuflaje, junto a varios prototipos que fueron cazados en pruebas, este debut era más que inevitable.
Dándole voltios al Charger
Lo que está confirmado antes del lanzamiento del Dodge Charger SRT es que este muscle car será 100% eléctrico. Así como su versión conceptual, clara inspiración del modelo final, podemos esperar una arquitectura de 400 y 800 voltios junto a configuraciones con uno o dos motores.
Los Charger “normales” tendrían arquitectura de 400v, con figuras que inician desde los 455 hp hasta los 600 a 650 hp. En la cima de la cadena alimenticia estaría el modelo Banshee, del cual se desconoce su poder pero incluiría todos los juguetes. Es decir, control de lanzamiento y una transmisión con marchas simuladas, escape con ruidos falsos y tracción en las cuatro ruedas.
Por el lado del diseño, Dodge utilizó una silueta contemporánea inspirada en los Charger clásicos de 1968 a 1970. Lineas sobrias con algo de musculatura enmascaran componentes aerodinámicos como el frente-spoiler inspirado (supuestamente) en el alerón del Charger Daytona para NASCAR.
Del interior se sabe poco pero, me atrevo a decir, será muy similar al exhibido por el concepto Daytona que inició toda esta “revolución eléctrica” del Charger.
La esperanza del motor a combustión
Lo curioso es que la electricidad no sería lo único que mueva al Charger y Dodge lo sabe. Varias filtraciones señalan a una alternativa con motor a combustión, que no sería el V8 Hemi de toda la vida.
Por el contrario, sería ese nuevo motor Hurricane de seis cilindros en línea y turbo, mismo que moverá a la RAM 1500 muy pronto. Pues bien, este propulsor es capaz de 500 o más caballos de potencia y ofrecerá un “punto medio” para quienes deseen un Charger, pero no quieran comprometerse con la era eléctrica.
Todo será revelado en exactamente un mes (5 de marzo). Día en el cual el lanzamiento del nuevo Dodge Charger nos dé, ojalá, más respuestas que incógnitas.
