Luego de ver al Lada más endiablado de la historia, nos quedamos en Florida, EE.UU. Hogar de las creaciones automotrices más excéntricas del mundo, a la par con Rusia. Apocalypse Manufacturing, responsable de muchos proyectos 6×6 que hemos explorado por aquí, es el creador del primer Rivian R1T eléctrico modificado, y luego de verlo deseamos que no se hubieran tomado la molestia.
Por fortuna no es un 6×6 ridículo, pero hay que aplaudir a Apocalypse. Una cosa es modificar una pickup estándar con su chasis de escalera, y otra es enfrentarse a un vehículo eléctrico. Ubicar su suspensión, llantas adecuadas y mantener el perfil aerodinámico del vehículo es todo un reto. Por eso Apocalypse quiso asumir ese desafío, con la intención de convertirse en el “preparador oficial” de Rivian. Algo así como lo es Shelby para Ford.
Esteroides y voltios a flor de piel
Todos y cada uno de los componentes añadidos a “Nirvana”, nombre que recibe este Rivian R1T eléctrico modificado, fue hecho desde cero y a mano. El chasis tuvo que ser alterado para aceptar una suspensión hecha a la medida, construida para replicar los parámetros de fábrica de Rivian. Una plétora de sensores, cables y medidas específicas complicaron el proceso de crear la suspensión, con muchos de los amortiguadores de aire destruidos durante el proceso.
Aparentemente tomó nueve meses en construirse, confiesa Joe Ghattas (dueño de Apocalypse) a The Drive. Después de mucho ensayo y error el preparador logró crear una suspensión levantada perfecta, para acomodar llantas A/T de 38 pulgadas. Probablemente este sea el Rivian R1T eléctrico, modificado o no, con mejor ángulo de ataque y vadeo. Su desempeño eléctrico se mantiene intacto, gracias a sus cuatro motores que producen en conjunto 835 hp.
En materia de estilo es lo que se espera de un preparador gringo. Una “armadura” de Kevlar convierte al Rivian en la pickup oficial de Hulk o Master Chief, pasos de rueda ensanchados y muchos polígonos para hacerle tributo al Tesla Cybertruck. Un diseño cuestionable, que tal vez no caiga en gracia con Rivian. Pero si la marca eléctrica se decide en ofrecer kits de levantamiento, ya saben a quién llamar.
