Así como el Porsche 356 hace 75 años nació primero como un convertible (o speedster), su homenaje siete décadas después también merecía ser a cielo abierto. A principios de año Porsche colocó la primera vela en su pastel de cumpleaños, en la forma de un concepto neo-retro conocido como 357, y varios meses después en Goodwood colocaron una nueva vela en forma de Speedster.
Sí, este es el Porsche Vision 357 Speedster, otra conmemoración a la rica historia de la marca que refleja mejor esa herencia que dio inicio a Porsche. En concreto, luce tan puro como el Porsche #1 con algunos tintes de 356A y 356B convertibles, al igual que el 550 Spyder original. Si piensa que son demasiadas inspiraciones no ha visto nada, porque el Vision 357 es una verdadera quimera con diferentes Porsche entremezclados.
Muchos Porsche en uno solo
Bajo esa apariencia minimalista se esconde lo que sospechábamos: el chasis de un Porsche 718, concretamente la versión para pista GT4 Clubsport. En esencia es lo que podría ser el Boxster/Cayman en el futuro, pero con líneas extremadamente simples para honrar esos trazos sencillos que caracterizaban al Porsche #1/356 de primera serie que deslumbró al mundo en 1948.
Sin embargo, como casi todo lo que tiene el apellido Vision, el Porsche 357 Speedster es eléctrico. En vez de usar el radical motor del GT4 Clubsport (que en sí es el mismo presente en el 911 GT3, Porsche mira a otro 718. En concreto, al prototipo GT4 e-Performance, en sí hijo del Mission R, configuración de motor dual (uno por eje) que por fin revela la verdadera naturaleza de los conceptos 357.
Porsche nos dice que este tren motor produce 1.073 caballos de potencia (!) en modo clasificación, restringidos a “solo” 604 equinos en una configuración para carrera más duradera. Aparentemente el 718 Cayman e-Performance y el 357 Vision tienen una velocidad tope cercana a los 300 km/h y un desempeño en pista a la par de un 911 GT3/RSR para carreras de resistencia.
Reinterpretando al primer Porsche
Si bien son números radicales, el enfoque de Porsche es reinterpretar el diseño que su fundador presentó al mundo en 1948. Pureza, como lo llama la misma marca al describir su concepto aquí presente. Casi que quedan en segundo plano sutiles detalles como un difusor trasero o un discreto labio frontal, al igual que los acentos azul eléctrico que cubren la carrocería y los gráficos por los 75 años.
En pura forma de Speedster, el Porsche Vision 357 tiene apenas un asiento como puro auto de carreras, que si bien no es afín al primer 356 si está en línea con los primeros autos de carrera de la marca. El volante es sospechosamente moderno entre un tablero y controles minimalistas sobre plásticos transparentes, como una nave futurista. Lo que más interesa a Porsche es la carrocería con trazos suaves y un alto grado de minimalismo, detalle que podría inspirar modelos futuros.
Aunque ahora son dos, no nos emocionamos ante un regreso del nombre 356. Si ha de ocurrir aquí está la clara inspiración, y si no sucede al menos los futuros 718 Boxster y Cayman pueden aprender una cosa o dos sobre este diseño. A final de cuentas, esos dos modelos son los sucesores espirituales del 356.
