Con Latinoamérica nos referimos a que el Fiat Fastback irá a varias naciones de la región, a excepción de Brasil porque en ese país hace bastante que se presentó. Así es, el primo cupé-SUV diferente del Pulse y toda la familia de Fiat sale de su natal suelo carioca dispuesto a conquistar más fronteras en el continente, buscando competir de cara a cara con uno de los favoritos en el mercado: el Volkswagen Nivus.
Son ocho los países de Latinoamérica a los que ahora llegará el Fiat Fastback: Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, República Dominicana, Paraguay, Perú y Uruguay. A todas esas naciones irá de forma paulatina, y lo que este anuncio deja claro es que llegará pronto de forma oficial, además de sugerir las posibles versiones que reciba cada mercado. Y eso es justamente lo que exploraremos aquí, lo que tiene el Fiat Fastback para ofrecer a todo el continente latino.
De Brasil para Latinoamérica
El Fiat Fastback es una creación 100% brasileña, diseñada por la marca en ese país para toda la región, justo como el Pulse. Su nombre hace referencia a la caída de su techo, término que se conoce como fastback y que se hizo famoso en autos como el Ford Mustang original. Para su segmento, la idea de un cupé-SUV es algo novedosa, ya que hay pocos competidores reales en esa categoría, fuera del ya mencionado Nivus. Así que es una oportunidad interesante de Fiat para aprovechar ese nicho y recuperar espacio en el mercado.
¡Turbo para todos!
El Fiat Fastback llega a Latinoamérica en varias presentaciones, con dos motorizaciones a elegir. En orden se encuentran los modelos Drive, Audace, Impetus y Limited, los tres primeros con un motor T200 (del Pulse Impetus) de tres cilindros, 118 hp y 200 Nm de torque acoplados a una caja CVT con “siete marchas simuladas”. Propulsor que se nos antojó económico y con mucho dinamismo en el Pulse, pero hay que tener en cuenta que el Fastback es más largo y pesado, llegando hasta los 4.42 m de largo y con una distancia entre ejes de 2.53 m.
El tope de gama Limited se mueve con un motor 4 cilindros turbo presente en productos de Jeep como el Commander o Renegade y el Fiat Pulse Abarth. Este desarrolla 173 hp y un torque de 270 Nm, junto a una caja automática tradicional de seis marchas con modo sport. Todos los Fastback son de tracción delantera, y si bien no se supone que sean todoterreno, su distancia al suelo de 19 cm y modo de manejo off-road no sobran.
“SUV deportivo” con equipamiento justo
En términos de diseño, es muy similar al Pulse, al menos en el frente. ¿Qué podemos decir? Es un cupé-SUV en regla, con un techo fastback, un spoiler que corona la parte trasera y un aspecto más musculoso que un crossover convencional. Sabemos que no gusta a todo el mundo, pero este tipo de autos vende bien, así prefiriéramos un hatchback convencional o un CUV deportivo. Si tiene miopía y lo ve de muy lejos quizá pueda confundirlo con un BMW X4 o Mercedes-Benz GLC. Rines de 17 o 18 pulgadas engalanan los pasos de rueda ensanchados del Fiat Fastback.
En equipamiento será, de nuevo, similar al Pulse. Hay un panel de instrumentos análogo para las versiones de entrada, y uno digital de 7” para los modelos más completos. Los faros son LED y hay cuatro airbags, cámara de reversa, carga inalámbrica y una pantalla de 8.4” para el modelo Drive, que posiblemente será solo para Bolivia y Chile.
La versión Audace introduce asistencias de manejo ADAS como mantenimiento de carril y asistente de frenado de emergencia; al igual que el sistema Uconnect de 10.1” y encendido por botón. El cuero emerge para los modelos Impetus y Limited, al igual que una carrocería bitono, rines diamantados, acceso remoto, entre otras conveniencias modernas. No tenemos fechas 100% confirmadas, pero el Fiat Fastback en sus tres variantes (o cuatro) llegará en el transcurso del año a esos 8 países de Latinoamérica, con un corte deportivo y un desempeño apropiado para sus intenciones, al menos en su modelo Limited más potente.
